Ellos están. Ellas nunca marcharon. Resisten en cada instante. El olvido no se los llevará. Su recuerdo se agarra a algo vital, a nuestro ser, forman parte de nosotros. Somos porque fueron. Nos enraízan a la tierra, a esas montañas, a estos muros de Casa. Ellos. Ellas. Madre. Padre. Yaya. Yayo. El hermano, la tata que no está. Amigos. Tíos. Queridos seres que configuran las piezas esenciales de una vida.
Quisimos desvestir de nostalgia ese recuerdo y cubrirlo de momentos de felicidad, de descripciones bonitas, de retratos de palabras de una memoria que nunca marchitará. Atendiendo a la semana de Todos los Santos, en los Talleres de Memoria del CPEPA Ribagorza invitamos a nuestro alumnado a desempolvar esas viejas fotografías y repasar frente al álbum la evocación de todos ellos, en unas descripciones sentidas en las que se reconocieron.
Esta actividad no solo nos sitúa en nuestra identidad y nos enraíza en el pasado, también sirve de estímulo para ejercitar nuestra mente con la llegada de esos instantes que guardamos en los cajones de la memoria. Un camino bonito que nos enseña de donde venimos para saber quienes somos: como ellos, valientes ribagorzanos.
«𝒀 𝒆𝒔 𝒒𝒖𝒆 𝒏𝒐 𝒆𝒔𝒕𝒐𝒚 𝒂𝒒𝒖𝒊́ 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒍𝒍𝒐𝒓𝒂𝒓
𝒗𝒐𝒔𝒐𝒕𝒓𝒐𝒔 𝒔𝒐𝒊𝒔 𝒎𝒊 𝒑𝒖𝒆𝒃𝒍𝒐, 𝒚 𝒆𝒔𝒕𝒐𝒔 𝒎𝒐𝒏𝒕𝒆𝒔 𝒎𝒊 𝒉𝒐𝒈𝒂𝒓.
𝑷𝒐𝒓 𝒆𝒔𝒐 𝒔𝒆́ 𝒒𝒖𝒆 𝒏𝒐 𝒃𝒂𝒔𝒕𝒂 𝒍𝒍𝒐𝒓𝒂𝒓;
𝒔𝒊 𝒔𝒆 𝒏𝒐𝒔 𝒄𝒂𝒆 𝒍𝒂 𝒄𝒂𝒔𝒂 ¡𝒔𝒆 𝒗𝒖𝒆𝒍𝒗𝒆 𝒂 𝒍𝒆𝒗𝒂𝒏𝒕𝒂𝒓!»
Dirigidos a personas adultas, estos talleres estimulan la atención, la memoria visual y la creatividad con actividades dinámicas como poesía, juegos y ejercicios interactivos en distintas localidades de toda Ribagorza gracias a la implicación del profesorado del Aula Adscrita de la Comarca de Ribagorza dentro de CPEPA Ribagorza.